Uno de los síntomas más comunes de una espondilosis cervical es el dolor en el cuello
También puede experimentar dolor en la mandíbula, el pecho, la cabeza, los hombros, las piernas o los brazos, así como debilidad o entumecimiento.
La espondilosis puede afectar cualquier parte de su cuerpo. También puede experimentar problemas de equilibrio, dolor, rigidez, falta de sueño, control de la vejiga y los intestinos y otros problemas físicos. Estos síntomas generalmente son causados por una inflamación entre las vértebras de la columna.
Las enfermedades de la columna no siempre ponen en peligro la vida y son fácilmente tratables. En algunos casos, es posible que se requiera cirugía y es importante discutir las opciones de tratamiento con su médico. Muchos de estos problemas se pueden resolver en casa. Sin embargo, es importante estar atento a los cambios en su cuerpo que pueden indicar que está sucediendo algo grave.
Si sospecha que tiene espondilosis cervical, consulte a su médico lo antes posible. Cuanto antes empiece a tratar el problema, mejor. A menudo, esta afección se diagnostica cuando nota dolor de cuello. Es probable que su médico revise su médula espinal y cuello para detectar anomalías.
Si su médico le diagnostica una lesión en el cuello o la columna, tratará el dolor con medicamentos antiinflamatorios. Le recetará analgésicos y fisioterapia, como estiramientos y masajes. Con el tiempo, su cuello debería volver a su tamaño y forma normales. Es posible que necesite un equipo especial para ayudar a que su cuello se mueva sin lastimarse.
Su médico también puede recomendar fisioterapia o aparatos ortopédicos si no se siente cómodo con su propia fisioterapia y aparatos ortopédicos. Si tiene un cuello fuerte, puede que le resulte más fácil lidiar con estos problemas. De lo contrario, su médico puede recomendarle usar una férula durante algunas semanas.
Al igual que con todo tipo de lesiones o enfermedades, es importante buscar atención médica de inmediato si tiene una lesión en la columna cervical. Si espera hasta que empeore, puede poner en riesgo su salud y la de su bebé. Si ha tenido un accidente traumático o una caída, es posible que no pueda sanar completamente a tiempo.
No existe cura para la espondilosis cervical
Sin embargo, puede comenzar a tratar el dolor y los síntomas de esta afección con los tratamientos que le haya recetado su médico. Al obtener más información sobre esta afección, puede conocer los tratamientos más efectivos disponibles, así como cuáles son los más seguros para usted. Hable con su médico si tiene dolor y problemas en el cuello.
Aunque aún no se conoce la causa de la espondilosis cervical, se cree que puede estar en riesgo si tiene sobrepeso. Su médico también puede decirle si su bebé está en riesgo o no. Si está amamantando, es posible que desee asegurarse de continuar con esta forma de medicamento durante el embarazo y la lactancia.
También es una buena idea prestar mucha atención al color de tu cabello. Si está grasoso u oscuro, puede indicar que puede haber un problema. Otros signos incluyen olor, sangre o moco en las heces, sangrado u otras afecciones.
Los chequeos regulares también son una buena idea para mantener saludable la columna cervical. Los controles periódicos para detectar cualquier anomalía también pueden ayudarlo a controlar el desarrollo de su bebé.
En general, cuanto antes pueda tomar medidas preventivas, mejor estará. Al tomar medidas para detener la espondilosis cervical en sus primeras etapas, puede evitar las complicaciones que la acompañan.
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